
¿Sospechas de curvatura del pene? Conoce la enfermedad de Peyronie
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¿Has sentido un dolor en la zona baja de la espalda y no sabes si se trata de un problema muscular o de los riñones? Soy el Dr. Carlos Velásquez, urólogo en Medellín, y quiero explicarte de manera sencilla qué puede estar pasando. Muchas mujeres consultan porque presentan molestias que confunden con dolor lumbar, cuando en realidad corresponden a un dolor en los riñones en la mujer, el cual puede tener diferentes causas, desde infecciones urinarias hasta cálculos renales.
En este blog te hablaré sin términos complicados para que comprendas mejor qué puede estar ocasionando ese dolor, cuándo es necesario consultar y cuáles son las opciones de tratamiento. Y si estás sintiendo estos síntomas ahora mismo, lo más recomendable es no esperar: agenda una consulta conmigo en Medellín y juntas podremos encontrar la causa y la solución adecuada para que recuperes tu tranquilidad.
Cuando atiendo a mis pacientes, una de las dudas más frecuentes es cómo diferenciar un dolor muscular en la espalda baja de un dolor que realmente provenga de los riñones. Entender esta diferencia es clave para saber cuándo preocuparse y cuándo acudir a consulta.

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Aquí te muestro una tabla sencilla que resume las principales diferencias:
| Característica | Dolor lumbar (músculos/columna) | Dolor renal (riñones) |
|---|---|---|
| Localización | Centro de la espalda baja | Lados de la espalda baja, debajo de las costillas |
| Relación con el movimiento | Empeora al agacharte, girar o cargar peso | No cambia mucho con el movimiento |
| Sensación | Dolor punzante o tensión muscular | Dolor profundo, constante o tipo cólico |
| Alivio | Mejora con reposo, masajes o calor local | Persiste aunque cambies de posición |
El dolor renal casi nunca aparece solo. Estos son los síntomas más comunes que pueden acompañarlo:
Debes consultar conmigo si presentas alguna de estas señales:
Si te identificaste con alguno de estos casos, no lo ignores. Agenda tu cita conmigo en Medellín para encontrar la causa y darte el tratamiento que realmente necesitas.
Lee también el blog Urólogo para mujeres: ¿Cuándo es necesario ir a consulta?
Cuando hablo con mis pacientes, una de las primeras necesidades es entender qué origina ese malestar. El dolor en los riñones en la mujer tiene causas muy variadas, algunas sencillas de tratar y otras que requieren atención médica inmediata. Reconocerlas a tiempo es fundamental para evitar complicaciones y recuperar la tranquilidad.
Las infecciones urinarias son una de las causas más comunes de dolor en los riñones. Cuando la bacteria sube desde la vejiga hasta los riñones, puede provocar una infección más seria llamada pielonefritis. Además del dolor, es frecuente sentir fiebre, escalofríos, cansancio y ardor al orinar. Este tipo de infección siempre necesita tratamiento médico con antibióticos.
Otra causa frecuente es la presencia de piedras en los riñones, que pueden bloquear el paso de la orina y generar un dolor intenso, en forma de cólico, que se irradia hacia el abdomen o la ingle. Este cuadro, conocido como piedras dolor en los riñones mujer, suele aparecer de manera súbita y se considera una urgencia que debe ser valorada por el urólogo.
En ocasiones, el dolor aparece porque algo está impidiendo que la orina fluya con normalidad desde los riñones hacia la vejiga. Estas obstrucciones pueden deberse a cálculos, estrechamientos de la vía urinaria o incluso alteraciones anatómicas. El resultado es un dolor persistente que debe tratarse para evitar daño en el riñón.
Los quistes renales son sacos llenos de líquido que, en la mayoría de los casos, no causan síntomas. Sin embargo, cuando crecen demasiado o se infectan, pueden provocar dolor en el costado y molestias similares a las de otras enfermedades renales.
Aunque menos frecuentes, los tumores en el riñón también pueden manifestarse con dolor. A veces se acompañan de sangre en la orina o una masa palpable en el abdomen. Detectarlos a tiempo mediante estudios de imagen es clave para iniciar un tratamiento adecuado.
Algunas enfermedades que afectan a todo el organismo, como la diabetes o la hipertensión, también pueden dañar los riñones y generar dolor a largo plazo. Estas condiciones requieren un manejo integral y controles médicos regulares para proteger la función renal.
Existen otras razones, como traumatismos en la zona lumbar o efectos secundarios de ciertos medicamentos, que pueden generar dolor renal en la mujer. Aunque no sean las más frecuentes, también es importante considerarlas dentro del diagnóstico.
Aquí quiero ser muy claro contigo: no existe una sola respuesta válida para todas, porque depende de la causa que esté generando el dolor.
El primer impulso suele ser buscar un analgésico en casa, pero debo advertirte que no es recomendable tomar medicamentos sin supervisión médica. Algunos fármacos pueden aliviar momentáneamente, pero también enmascarar los síntomas o incluso empeorar la función de los riñones si se usan de manera inadecuada.
En ciertos casos, cuando el dolor es leve, se pueden indicar analgésicos o antiinflamatorios para controlarlo. Sin embargo, no todos son seguros para el riñón, y por eso es fundamental que sea un médico quien te prescriba el medicamento adecuado y en la dosis correcta.
Si la causa del dolor son infecciones urinarias o una pielonefritis, lo indicado no es un analgésico sino antibióticos específicos. Solo un urólogo, como yo, puede ordenar el tratamiento correcto después de confirmar el diagnóstico con análisis de orina o estudios de imagen.
Beber suficiente agua es una de las mejores medidas para ayudar a los riñones, especialmente si sospechamos de cálculos. Sin embargo, en algunos casos, como cuando hay obstrucciones graves, incluso el exceso de líquidos puede ser contraproducente, y por eso siempre insisto en que es mejor tener una valoración médica antes de automedicarte.
Si estás sintiendo dolor en los riñones, no te arriesgues a tomar medicamentos por tu cuenta. Yo estoy autorizado para indicar el tratamiento que realmente necesitas, ya sea con medicamentos, antibióticos o procedimientos específicos. Lo más seguro es que agendes una cita en Medellín para estudiar tu caso y darte la solución adecuada.
Muchas de mis pacientes me cuentan que el dolor en los riñones empeora en la noche o que no les permite dormir bien. Esto no solo interfiere con el descanso, sino que también puede ser una señal de que algo más serio está ocurriendo en tu cuerpo. El dolor en los riñones en la mujer durante la noche no debe pasarse por alto, ya que a veces indica infecciones o cálculos que requieren atención médica.
Algunas posturas pueden ayudarte a descansar mejor mientras buscamos la causa real del dolor:
Estas son medidas de apoyo, pero no reemplazan el tratamiento médico.
Hay situaciones en las que el dolor en los riñones durante la noche debe ponerte en alerta:
Si te identificas con alguno de estos casos, no lo dejes pasar. Un dolor en los riñones que interrumpe tu sueño es una señal de que necesitas valoración médica. Agenda tu cita conmigo y encontraremos la causa y el manejo adecuado para que vuelvas a descansar tranquila.
Es normal que al sentir dolor en la zona baja de la espalda te preguntes: ¿serán los riñones o será un problema muscular? Esta duda es muy frecuente, porque ambos dolores se localizan en áreas cercanas y pueden confundirse. Por eso quiero darte algunas claves sencillas que uso en consulta para ayudar a diferenciarlos.
El dolor de origen lumbar o muscular suele:
Un ejemplo común es cuando después de un día de mucho esfuerzo físico o mala postura frente al computador, el dolor aparece y disminuye con descanso.
El dolor en los riñones en la mujer suele ser distinto y presenta características como:
Por ejemplo, una paciente con cálculos renales suele describir el dolor como una punzada muy fuerte que va y viene, y que no mejora sin atención médica.
Cuando ya hemos identificado la causa del dolor, lo más importante es iniciar un tratamiento adecuado y seguro. En mi experiencia como urólogo, cada caso es diferente, y el manejo debe ser personalizado según la condición que esté afectando tus riñones.
El primer paso suele ser el uso de medicamentos. Si el dolor está relacionado con una infección urinaria, indico antibióticos específicos para eliminar la bacteria. Si se trata de una inflamación o de cálculos pequeños, puedo recetar analgésicos o antiinflamatorios que alivien los síntomas mientras el cuerpo resuelve el problema. Quiero insistir en algo: estos medicamentos siempre deben ser formulados por un médico, porque algunos pueden dañar más los riñones si se usan sin control.
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En algunos casos, los medicamentos no son suficientes. Cuando el dolor se debe a piedras en los riñones que no logran salir solas, existen procedimientos muy efectivos y poco invasivos, como la litotricia extracorpórea, que fragmenta las piedras con ondas de choque. En situaciones más complejas, recurrimos a cirugías mínimamente invasivas que permiten retirar los cálculos o liberar obstrucciones en la vía urinaria. La buena noticia es que la mayoría de estos procedimientos tienen una recuperación rápida y segura.
El tratamiento no termina cuando desaparece el dolor. Es fundamental realizar un seguimiento para confirmar que la causa ha sido resuelta y que tus riñones funcionan bien. Además, en consulta te enseño cómo prevenir que el dolor reaparezca: desde cambios en la alimentación, hidratación adecuada, hasta la detección temprana de factores de riesgo como infecciones recurrentes o antecedentes familiares de cálculos.
En ciertos cuadros, sobre todo cuando hay cálculos pequeños, el aumento en la ingesta de agua puede ayudar a expulsarlos. También recomiendo ajustes en la dieta, como reducir la sal y moderar el consumo de proteínas o alimentos ricos en oxalatos (como espinaca o chocolate). Estos cambios, aunque parecen simples, marcan una gran diferencia en la evolución y prevención del dolor renal.
Cuando los cálculos no salen solos o bloquean la vía urinaria, podemos recurrir a procedimientos especializados. La litotricia extracorpórea utiliza ondas de choque para fragmentar las piedras, permitiendo que salgan en pedazos más pequeños por la orina. En casos más complejos, la solución puede ser una cirugía mínimamente invasiva, que realizo a través de pequeñas incisiones o incluso con cámaras introducidas por la vía urinaria. Estos procedimientos son seguros, efectivos y con una recuperación mucho más rápida que la cirugía tradicional.
Cuando una infección en los riñones se complica o el dolor es incapacitante, puede ser necesario hospitalizar a la paciente. En esos casos indico antibióticos intravenosos, control estricto del dolor y líquidos administrados en un ambiente seguro. Esto garantiza que la infección o la obstrucción no afecten la función renal a largo plazo.
Una vez controlado el dolor, el siguiente paso es asegurarnos de que no vuelva. El seguimiento médico incluye exámenes de orina, análisis de sangre y ecografías periódicas para verificar que los riñones funcionan bien. Además, te enseño estrategias personalizadas para prevenir que el problema reaparezca: desde hábitos de hidratación, cambios en la dieta, hasta recomendaciones sobre la actividad física y el cuidado de la salud urinaria.
Quiero terminar recordándote algo muy importante: el dolor en los riñones en la mujer nunca debe verse como algo normal. Puede ser el aviso de una infección, de cálculos o de un problema más complejo que, si se detecta a tiempo, tiene soluciones efectivas.
Cuanto antes consultes, más rápido podremos identificar la causa de tu dolor y comenzar el tratamiento adecuado. Muchas de mis pacientes llegan después de semanas de malestar, creyendo que era un simple dolor de espalda. Sin embargo, al hacer los exámenes, descubrimos infecciones avanzadas o cálculos que ya estaban generando complicaciones. La consulta temprana no solo evita que el dolor empeore, también protege tu salud renal a largo plazo.
Como urólogo en Medellín, he acompañado a muchas mujeres en el diagnóstico y tratamiento del dolor en los riñones. Mi experiencia me ha enseñado que cada caso es único, y por eso combino el conocimiento médico con una atención cercana y personalizada. Ya sea que necesites medicamentos, procedimientos especializados o un plan de prevención, estaré a tu lado en cada paso del proceso.
Si estás sintiendo dolor en los riñones, no lo ignores ni esperes a que se vuelva insoportable. Agenda tu cita conmigo en Medellín y encontraremos la mejor manera de cuidar tu salud renal y devolverte la tranquilidad que mereces.
El dolor en los riñones en la mujer suele sentirse en los costados de la espalda baja, debajo de las costillas. Es un dolor profundo, que no cambia mucho con el movimiento y que puede acompañarse de fiebre, náuseas o cambios en la orina.
Lo más importante es no automedicarte. En algunos casos se indican analgésicos, en otros antibióticos, pero la elección depende de la causa del dolor. Solo un urólogo puede recetar lo adecuado tras una valoración.
Las causas más frecuentes son infecciones urinarias, cálculos renales, obstrucciones de la vía urinaria, quistes o enfermedades sistémicas como la diabetes o la hipertensión.
Algunas mujeres notan que el dolor se intensifica al dormir, especialmente de noche. Esto puede ser señal de cálculos, infecciones o inflamación en los riñones, y requiere valoración médica.
El dolor de espalda suele empeorar con el movimiento y mejora con reposo. El dolor en los riñones es más profundo, constante y muchas veces viene acompañado de fiebre o cambios en la orina.
Las piedras en los riñones generan un dolor muy intenso, tipo cólico, que aparece de forma repentina y puede irradiarse hacia el abdomen o la ingle. Este dolor suele ser tan fuerte que impide seguir con la rutina diaria y necesita atención médica inmediata.
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